Que sean las letras las que nos expien de penas y pecados. Que sean las letras las que nos lleven a lugares de los que diariamente pasamos inadvertidos. Y que sean ellas las que disuelvan la amargura, y devuelvan lo llorado con sonrisas plenas. Expresando con total impunidad lo que una boca calla ante las querellas del razonamiento.
Jael Díaz Ubilla y Elías Días © 2011. Todos los derechos reservados para mi buen amigo y yo.
=D Nuestra composición en conjunto. Única.
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